Los cambios no son fáciles. Pueden ser aterradores y hostiles. Pero, cambiar también puede ser emocionante, valioso e incluso necesario. Cuando estás motivado y listo para cambiar tu vida, es tentador saltar con los dos pies. A menudo se siente que es necesario un cambio a gran escala para mejorar realmente tu vida. Pero, si estás buscando mejorar tus relaciones, la carrera, o las finanzas del hogar, quizás un cambio drástico puede no ser la mejor respuesta realmente. Los grandes cambios pueden ser difíciles de sostener, y abandonar lo que iniciaste no sólo te deja en la misma situación, sino que también puede socavar tu motivación y tu energía. Más aún, hacer cambios significativos puede llevar a consecuencias inesperadas.
En vez de lanzarte a una reorganización mayor de tu vida, los ajustes pequeños pueden ser justo lo que necesitas para ver mejoras positivas. Los cambios pequeños son más fáciles de mantener y resultan ser una excelente manera de probar cómo se comportan las aguas al comprometerse con algo más serio. No obstante, no creas que pequeño quiere decir insignificante. Los pequeños cambios suman a los grandes resultados.
Implementa pequeñas transformaciones en el trabajo
¿Te sientes agotado y harto de tu trabajo? No presentes esa carta de renuncia por el momento. Con frecuencia, uno o dos pequeños cambios son suficientes para recargar tu motivación y conseguir que tu carrera se mueva en la dirección correcta. Habla con tu jefe sobre la posibilidad de ser responsable de nuevos desafíos o proyectos. Aprender algo nuevo y abordar algo interesante puede hacer que el mismo trabajo se sienta como nuevo, y le suma antecedentes y versatilidad a tu currículum. Cambiar tu horario de trabajo también podría ser suficiente para incentivarte y modificar la actitud.
Tu entorno de trabajo también juega un papel importante en la satisfacción laboral. Limpiar tu escritorio y reorganizar tu espacio puede renovar la energía, y agregar fotos de tu familia o algunas instantáneas de unas vacaciones muy queridas pueden ayudar con la motivación.
También es importante disfrutar de la gente con la que trabajas, por cuanto trata de reunirte y relacionarte con tus compañeros de trabajo. Organizar una happy hour después del trabajo o di algo interesante para sentarte con alguien nuevo en el almuerzo.
Modificación modesta en tus relaciones
¿Tu llama se siente más como un parpadeo? Si sientes que la chispa se ha agotado, podrías estar pensando en romper y seguir adelante. Todas las relaciones pasan por etapas y requieren esfuerzo y atención. Si todavía estás enamorado, y estás en una relación con alguien que te trata bien, intenta volver a encender los fuegos de la pasión con unos pequeños cambios.
Si no tienes una noche fija como cita regular en tu calendario, comienza a planificar algo de tiempo para ambos. Las relaciones a menudo tropiezan por no tener suficiente tiempo dedicado a solas, el uno para el otro. Olvídate de la rutina de la cena y la película e intenta algo nuevo. Planea un picnic en el parque, un viaje al zoológico, o simplemente un paseo por el barrio. Haciendo algo diferente les dará nuevos temas de conversación y los sacará a ambos de la zona de confort.
Renovar tu apariencia también puede ser una manera divertida de recargar tu relación. Un nuevo corte de pelo, un nuevo maquillaje o una nueva vestimenta te hará sentir bien contigo mismo y harás que sus ojos se posen en ti. No olvides sumar nuevas prendas sexy a ese nuevo conjunto.
No hagas cambios solo
No importa cual sea el área de tu vida que quieras mejorar, no necesitas hacer los cambios solo. Hablar con un asesor psíquico es la mejor manera de averiguar en qué cambios deberías enfocarte. Hablar con un asesor psíquico puede aliviar el estrés del cambio y te puede ayudar a sentirte confiado acerca de la dirección que estás tomando.